Señales, símbolos, advertencias, marcas de piedra en la piel de los muros…Rostros y figuras que observan a quienes les prestan atención, a su vez disimulados testigos de su presencia. Mensajes de un enigmático mundo primitivo que ignoramos, y que conducen al Lince con Botas a hollar calles de la Sierra de Gata donde la paciencia, dicen algunas paredes, ha vencido a la prisa. Son palabras de piedra de una lengua extraviada, que intentamos comprender…