La poesía es el lugar por donde no ha pasado nadie, dijo el guitarrista Paco de Lucía. Entonces, elección de un estilo arqueológico, difunto, entregado a la palabra, obediente ante dos poetas que mezclan su obra con sus fuentes, de modo explícito o en forma de informe: Emilia Oliva y Jonás Sánchez Pedrero. ‘Cuerpo sin voz’ y ‘Bulto’, sus poemarios y en sus voces la obra de otros: Aníbal Nuñez, José Bergamín, Luis Cernuda…